Ella
Mientras bebía café;
ella lo pensaba y sonreía,
como si en aquella mesa
tuviese compañía.
Mientras leía un libro;
ella pausaba y sonreía,
como si aquellas letras
a su mente lo traían.
Mientras miraba la lluvia caer;
ella lloraba y sonreía,
como si aquellas gotas,
sus más locas emociones removían.
Mientras vivía;
ella lo amaba y sonreía,
porque aquel sentimiento
le inyectaba vida.
T. Faerron