Su Sonrisa

No sabía lo que causaba con ella.
El rostro entero le cambiaba,
su mirada con un prodigioso brillo.
Plegadas mejillas, que hacían ver años de alegría.

Honor de pocos,
pues no la manifestaba con frecuencia.
Parecía que la guardaba con egoísmo, 
o quizá con temor a perderla; malgastarla.

Su sonrisa.
Privilegiada, cálida y cautivante.
Su sonrisa.
Plena, limitada y refrescante.

Hermosa, única y dominante.

T. Faerron

Comentarios

MÁS VISTAS

Estoy enamorada

Perdida

Pero él